Bentley celebra el 60 aniversario de su venerable V8, el motor que ha prestado un servicio más prolongado en la marca. Originalmente, el primer modelo que lo equipó fue el S2 de 1959, desde entonces se han producido 35.898 unidades.El desarrollo del primer motor Bentley V8 comenzó poco después de que la compañía se mudara a su sede actual en Crewe. A principios de la década de 1950, se le pidió a Jack Phillips, diseñador de motores, que realizara un estudio para encontrar un sustituto para el motor de seis cilindros que utilizaban los Bentley Mark VI, R-Type y S1.
Los requerimientos que recibió el diseñador es que el motor fuera al menos un 50% más potente que el de seis cilindros que reemplazaría, mientras ocupaba el mismo espacio debajo de un capó sin aumento de peso. La solución fue la configuración en V y tras 18 meses, el motor estaba listo para las pruebas; tan solo en banco, la unidad de pruebas estuvo 500 horas funcionando al máximo régimen. El motor V8 de 6.2 litros era unos 13 kg más ligero que el modelo de seis cilindros.
El motor V8 original tuvo que ser rediseñado para adaptarse a los nuevos Bentley T-Series presentados en 1965. El rediseño se enfocó en mejorar el rendimiento, mientras reducía las dimensiones generales del motor para adaptarse al espacio disponible. En 1971 nuevamente fue puesto al día, el objetivo fue aumentar el par motor.
En 1980 llegó el primer Bentley Mulsanne, y este requirió cambios importantes en el V8. Entre otros la necesidad de controles de emisiones más estrictos y una mayor seguridad de los pasajeros en caso de un impacto frontal. Este último incluía una bomba de agua plegable, que efectivamente acortaba el motor en 10cm.
El mayor cambio en el motor llegó con el lanzamiento del Mulsanne Turbo. Con la instalación de un gran turbocompresor, el motor de 6¾ litros se convirtió en el primer motor Bentley de inducción forzada desde los que impulsaron los Blower Bentleys de Tim Birkin de la década de 1920. Desde entonces, la inyección de combustible, la sincronización variable de las válvulas y la desactivación del cilindro se han incorporado al motor. La potencia subió lentamente a niveles superiores a los 500 CV, mientras que las cifras de par aumentaron a más de 1.000 Nm.
En la actualidad, el 6 litros V8 del Bentley Mulsanne que rinde 530cv y 1.100 Nm de par es todavía heredero de este bloque ya que mantiene algunos detalles de diseño comunes. Por último, los Continental GT y Bentayga también utilizan un novedoso motor V8 de 4.0 litros. El V8 es una configuración de motor con una larga historia en Bentley.