El Grupo BMW ha introducido la tomografía computarizada (TC) en el desarrollo, producción y análisis de prototipos. Su uso no solo será aplicado solo BMW sino también a MINI o Rolls Royce.
El escaneo es realizado por cuatro robots que se mueven alrededor del exterior del prototipo para producir miles de imágenes de secciones transversales. Estas imágenes se emplean, posteriormente, para realizar exámenes detallados de innovaciones, nuevos materiales y tecnologías de pegado.
Hasta ahora, los vehículos tenían que ser desmantelados para realizar estos análisis, pero la tomografía computarizada permite hacer estas comprobaciones con el vehículo completamente intacto.
El nuevo sistema de rayos X está ubicado en la Planta Piloto de BMW Group en el Centro de Investigación e Innovación (FIZ) en Múnich, en la intersección entre las fases de desarrollo y producción.
Los datos que recaban son procesados por un programa informático especialmente desarrollado, que genera una imagen tridimensional de varias capas. Esta imagen es la base para un análisis detallado del funcionamiento interno del vehículo, ofreciendo información de objetos tan pequeños que apenas alcanzan los 100 micrómetros, aproximadamente el grosor de un cabello humano.
Los ingenieros están llevando a cabo investigaciones para establecer hasta qué punto se puede usar la Inteligencia Artificial para evaluar la información recogida. Procesando grandes cantidades de datos, el software puede aprender la gran cantidad de diferentes patrones que se producen, vincular elementos individuales a los datos y evaluar los hallazgos de forma automática.