Toyota ha anunciado que se encuentra realizando pruebas de conducción automatizada en vías públicas europeas. Tras probar con éxito en simulaciones y ensayos en circuitos cerrados, Toyota prosigue la pruebas en un entorno urbano real, el centro de la ciudad de Bruselas (Bélgica).
El modelo utilizado para el programa de pruebas se trata de un Lexus LS que circulará por carreteras públicas abiertas y no tiene más modificaciones que el conjunto de sensores montado en el techo, que incluye LIDAR, radares, cámaras y un sistema de posicionamiento. En el vehículo, habrá un conductor por seguridad, que puede intervenir y anular el sistema de control de conducción automatizada en cualquier momento, e irá acompañado por un operador que supervisará el funcionamiento del sistema.
Toyota ha anunciado que este programa tiene como objetivo la validación del sistema de conducción automatizada, formación de los conductores, análisis de las rutas y obtención de las autorizaciones necesarias de las autoridades oportunas. El grupo automovilístico nipón está trabajando en dos modelos distintos de conducción automatizada en paralelo, llamados Guardián y Chófer 1.
El vehículo automatizado se empleará asimismo para recoger datos como parte de la participación de Toyota en el proyecto europeo ‘L3Pilot’, junto con otros 34 socios, entre los que se encuentra grandes fabricantes de automóviles, proveedores de automoción, institutos de investigación y autoridades. El L3Pilot es un proyecto europeo a cuatro años lanzado en 2017 y parcialmente financiado por la Comisión Europea.