Bajo la atenta mirada de un notario el Mercedes-AMG GLC 63S 4MATIC + ha conseguido marcar en el trazado de Nürburgring un tiempo por vuelta de 7.49.369 minutos, lo que le convierte en el SUV de serie más rápido; el ingeniero de desarrollo de AMG Markus Hofbauer fue el encargado de pilotar en la vuelta.
Este verano Skoda metió al nuevo Kodiaq RS en este circuito y obtuvo un tiempo de 9:29.84 minutos, salvandos la diferencias de potencia
Aquí podéis ver la vuelta récord: