Nuevo Audi Q7: más tecnología y diseño para el SUV alemán
El Audi Q7 siempre ha sido el todocamino más grande de Audi y en esta ocasión se ha renovado completamente con más tecnología y novedades.
Era 2005 cuando Audi presentó en público su primer SUV, para competir con otros fabricantes alemanes que ya tenían en su catálogo algo similar (Mercedes-Benz ML o BMW X5). Ahora, en 2019 la segunda generación del Q7 se vuelve a renovar completamente para actualizarse en un mercado cada vez más solicitado de SUV.
El Audi Q7 muestra elementos SUV característicos del actual lenguaje de diseño de Audi. Eso incluye la gran parrilla Singleframe octogonal, con seis barras verticales cromadas como estructura. De esta forma, el SUV aparece aún más imponente. Los faros, disponibles opcionalmente con tecnología HD Matrix LED incluyendo iluminación Audi láser, realzan la anchura del modelo con su contorno y su firma lumínica. En la parte posterior, una llamativa banda cromada crea la conexión visual entre los estilizados grupos ópticos traseros, con su grafismo de aspecto técnico, añadiendo una sensación de horizontalidad aún mayor.
Este nuevo Q7 ha crecido aún más respecto a su versión anterior. Ahora alcanza ya los 5,063 metros (11 mm más que antes) y 1,97m de anchura, haciéndolo aún más cómodo al contar con más espacio en las plazas posteriores.
Está disponible en versión de 5 y 7 asientos, y tiene un maletero de 865 litros (y hasta 2050 litros con los asientos abatidos) en su versión de cinco asientos, siendo inferior en la de siete.
La estabilización activa antibalanceo está disponible como opción. Las barras estabilizadoras ajustables de este sistema reducen el movimiento de la carrocería al circular por carreteras con firme irregular. Cuando se practica un estilo de conducción deportivo, las barras se encargan de mitigar sustancialmente la tendencia de la carrocería al balanceo cuando el vehículo se inscribe en las curvas.
Opcionalmente se puede equipar también suspensión neumática adaptativa, así como ruedas traseras directrices que ayudarán a que el nuevo Audi Q7 sea mucho más ágil.
El interior ha sido renovado completamente siguiendo el resto de la gama Audi y basándose completamente en el recién presentado Audi Q8. Todos los materiales utilizados son de primera calidad y crean un ambiente agradable dentro del habitáculo.
Las pantallas son de un tamaño generoso (10″ en el caso del MMI y 9″ para la del climatizador). Ambas tienen respuesta háptica para dar feedback al conductor sobre si ha pulsado el botón correcto o no sin tener que desviar la vista de la carretera. La pantalla digital del cuadro es la mayor de las tres, siendo de 12 pulgadas. El coche tiene conectividad 5G, punto Wifi, control por voz y otros servicios como Audi Connect (que permite conocer dónde está aparcado el vehículo y si lo hemos cerrado correctamente).
Como novedad, el Q7 incluye Alexa integrada en el MMI y un nuevo servicio llamado Car-to-X con información de semáforos. De modo que se informará al conductor para que pueda optimizar su marcha para llegar al siguiente semáforo en verde.
Todos los motores del Audi Q7 se combinan con un cambio tiptronic de ocho velocidades y con la tracción total permanente quattro. En el lanzamiento al mercado se ofrecerán dos versiones diésel. Unos meses después, en septiembre, se unirá una versión de gasolina, seguida de una variante híbrida enchufable.
La tecnología Mild Hybrid de serie tiene un papel fundamental en la eficiencia de estos motores. En condiciones de utilización real, esta tecnología puede reducir el consumo de combustible hasta en 0,7 litros cada 100 kilómetros. Su componente principal es un alternador-motor de arranque por correa (BAS), que alimenta un sistema eléctrico principal de 48 voltios, en el que una compacta batería de iones de litio almacena la energía. En las frenadas, el BAS puede recuperar hasta 8 kW de energía eléctrica y dirigirla a la batería. Si el conductor levanta el pie del acelerador a velocidades de entre 55 y 160 km/h, el Audi Q7 puede recuperar energía o avanzar en modo de marcha por inercia con el motor apagado hasta 40 segundos. El dispositivo BAS vuelve a arrancar el motor en cuanto se pisa de nuevo el acelerador. El sistema start-stop opera automáticamente a velocidades inferiores a 22 km/h.
Las versiones diésel estarán compuestas por el motor 3.0 TDI en dos potencias. Una de 231CV llamada 45 TDI y otra de 286CV llamada 50 TDI. La versión de gasolina se llama 55 TFSI y proporciona 340CV de potencia.